Buen Provecho.
Soy Paolo.
La base de nuestra pizza es un proceso lento de maduración de nuestra masa, que permite usar poca levadura y hacer trabajar el tiempo a nuestra ventaja, consiguiendo un producto altamente digerible.
En Roma se usa mucho la pizza en charola proponiendo varios gustos (de 4 a 6 diferentes) vendiéndola al detalle y pesada en báscula, puede ser para el niño que entra a la escuela o un almuerzo del empleado o un antojo. La propuesta de pizza es de un producto de calidad que puede durar en el tiempo manteniendo sus características inalteradas por un día entero.
Aprendí la técnica para lograr este resultado, una pizza que no pierde su sabor ni textura en el tiempo, gracias a la “Scuola Nazionale di Pizza” en Roma. Estudios de la vanguardia técnica y química sobre la gastronomía aplicada al proceso de las harinas y su desarrollo.
En otras palabras soy formalmente un Pizzero certificado.
“Paoletto Restaurante Italiano Pizzería” propone pizza rectangular con esta misma técnica, solo que todo es a la carta proponiendo variedad de gustos entre pizza con base blanca y con base roja. Además de la pizza redonda individual ó para 2 personas. La diferencia sustancial es que la pizza rectangular es de masa un poco más gruesa con respecto a la pizza redonda, ambas crujientes.
La pizza por sí misma es un producto gastronómico muy flexible que puede combinarse con varios ingredientes. Fundamentalmente se dividen en dos: pizza con base roja (salsa de tomate) y pizza con base blanca muy característica en Roma.
Si no conoces nuestro concepto en Pizzas, te invito a probarlo.
Estoy seguro que regresarás.
Arrivederci.
– Paoletto –